AL LÍMITE - RICK ENGLISH, PILOTO ACROBÁTICO
El piloto acrobático Rick English se ha labrado su reputación en la industria realizando escenas de lucha y acrobacias en moto. Hablamos con él de los momentos culminantes de su carrera y de sus motos Triumph favoritas.
¿Cuánto tiempo llevas haciendo acrobacias y cómo empezaste en el mundo del stunt?
Recuerdo ver una película sobre Evel Knievel llamada Viva Knievel cuando tenía seis o siete años. Me causó mucha impresión y pensé que eso es lo que quería hacer de mayor, aunque no era precisamente lo que mis profesores me recomendaban. Más adelante me di cuenta de que podía ser algo con lo que ganarme la vida, además de disfrutar con ello.
¿En cuál de las películas que has hecho has disfrutado más?
Las franquicias de Misión Imposible y Fast and Furious han sido buenas para mí, pero tal vez me quedo con las películas de Bond, que son un sueño hecho realidad para cualquier piloto de acrobacias y yo he tenido la suerte de trabajar en las cinco últimas, es decir cuatro de ellas con Daniel Craig, todo un privilegio a decir verdad.
En la última película de Bond, No Time to Die (Sin tiempo para morir), estuve en Matera con Paul Edmondson y los demás compañeros, y yo conducía una Tiger 1200 mientras el tío que llevaba de paquete le disparaba a Bond. Los paisajes allí son espectaculares, pero la conducción es peligrosa debido al firme. En todas partes hay piedra pulida, lo cual dificulta el agarre, especialmente cuando llevas detrás a un tiarrón con una ametralladora y vas a toda velocidad por esas calles y subiendo y bajando escaleras. Rodar esa secuencia fue una experiencia muy exigente pero también muy divertida.
¿Qué motos has usado en tus acrobacias en el cine y cuáles son tus favoritas?
He conducido bastantes Triumph. He llevado unas cuantas veces una Street Triple, que es una moto para todo muy buena ya de serie. Puedes hacer de todo con ella, despliega la potencia justa. Desarrolla un buen par, es cómoda de conducir y es muy fácil hacer caballitos con ella, pero además nunca pierde el ímpetu, por lo que presenta un muy buen equilibrio. Me gustan tanto la Speed como la Street Triple, pero tengo que decir que la Street Triple es mi favorita. En las películas solemos filmar secuencias a baja velocidad, en primera y segunda, y la Street Triple es perfecta en términos de potencia y velocidad.
He usado la Scrambler 1200 recién salida de fabrica varias veces y los técnicos me ha preguntado «¿Qué modificaciones necesitas que le hagamos a la moto? ¿Tenemos que cambiar las marchas?», pero para mí no hace falta nada. Basta con calentar los neumáticos y los frenos y ya está lista. Estoy conduciendo una en un espectáculo ahora mismo y no la hemos tocado, no le hemos hecho ninguna modificación. Es una buena moto.
¿Cuál es la acrobacia más difícil que has hecho nunca?
Todas tienen sus dificultades. Mucha gente me pregunta, incluso pilotos, ¿cómo se accidenta a propósito una moto? Yo creo que es cuestión de concentrarse completamente en la técnica de lo que estoy haciendo. Sé que tengo que llegar a una determinada marca, girar a la derecha, accionar el freno trasero, esperar a que algo suceda y soltar el freno. Me lo planteo como un proceso, en vez de pensar en que me voy a chocar.
Has dicho que participaste en carreras cuando eras más joven. ¿Qué motos llevabas?
Solía correr con motos Supersport 600 a nivel club. Hace unos 20 años dejé las carreras y me centré en las acrobacias. Sigo corriendo en los circuitos, trato de llevar todo tipo de motos, así que hago track days, acrobacias, supermoto y un poco de motocross y flat track. Me gusta todo, y de todo se aprende.
¿Quiénes son tus fuentes de inspiración?
Cuando era un chaval fue Eddie Kidd. Era la versión británica de Evel Knievel, y era famoso por sus tremendos saltos con moto por encima de autobuses. Tuve ocasión de conocerle hará unos 15 años, y le conté que había ido a ver su espectáculo cuando era un crío. Cuando te das de alta en el registro británico de pilotos acrobáticos tienes que poner una foto que muestre tus habilidades, y literalmente recreé una foto que tenía de Eddie Kidd haciendo su caballito. Se la enseñé en nuestro encuentro y me la firmó. Y en cuanto a las carreras yo diría que Barry Sheene. Desde luego, esos dos seguro. Dos grandes fuentes de inspiración.